Las gitanas quieren ser escuchadas. Cambian las tradiciones del pañuelo como prueba de virginidad, la del luto riguroso y la de los matrimonios tempranos. Estudian, trabajan fuera de casa y conducen. Discriminadas y estereotipadas, se organizan para reivindicar sus derechos y promover un feminismo diverso
Para seguir leyendo:
http://www.pikaramagazine.com/2013/10/una-revolucion-lenta-pero-irreversible/